Y de Asia nos vamos a Oriente Medio, hoy con una nueva receta que no lleva harina y su base es la sémola. Creo que es muy fácil encontrar este dulce en Egipto y Líbano, tengo que seguir investigando.
Alfredo, un amigo mio, me pasó la receta por email, he variado algún ingrediente:
- 400 gr. de sémola fina
- 135 gr. de azucar
- 90 gr de coco rallado
- 2 huevos
- 170 gr. de margarina bio oliva (origen vegetal)
- 1 yogurt
- 130 ml de leche o bebida de avena
- 1 sobre de levadura en polvo
- 10 gr. vainilla en polvo
- unas pocas almendras para adornar
Introduces en una amasadora con varilla de amasar todos los ingredientes descritos anteriormente, aproximadamente en ese orden, dos anotaciones: la mitad de la sémola la pasas por un molinillo de los de café (unos 200 gr.) y la margarina que esté medio derretida. Comienza con una velocidad muy baja y vas subiendo a una un poco más alta, unos 6-8 minutos más. Engrasas un molde, extiendes la masa uniformemente y lo introduces en le frigorifico, 30 minutos aproximadamente; lo sacas y haces las separaciones con un cuchillo y colocas media almendra en cada porción, lo dejas otros 30 minutos más en la nevera.
Mientras va haciendo su trabajo la amasadora haces un sirope con 400 ml. de agua, 475 gr. de azúcar y el zumo de medio limón. Cuando rompe a hervir bajas el fuego, a continuación lo dejas unos 10 minutos revolviendo de vez en cuando; deja que baje la temperatura del sirope antes de añadir el agua de azahar para que le de el toque final. Lo reservas.
Pasado el tiempo de reposo de tu basbousa la horneas durante 30 minutos a unos 190 grados, cuando esté dorada la sacas y añades el sirope bien repartido, antes habrás marcado de nuevo las líneas de las porciones con un cuchillo. Vuelve a hornear a la misma temperatura unos 15 minutos más, esta vez con la bandeja del horno más baja.
Es un dulce económico que te cunde mucho con bastantes invitados. Con estas cantidades unas 24 porciones. Si incrementas un 40% los ingredientes te salen alrededor de 45 pastelitos.