Helado de algarroba y nueces

Cuando mi amigo Valen viene a casa a cenar o tomar algo, como vea alguna salsa blanca, casi siempre me pregunta: ¿lleva nata? No, no lleva, acuérdate que no la uso.

La nata es un producto con mucha materia grasa y de origen animal, ¿por qué no hacer las cosas con otros productos más sanos y naturales? Hoy me ha sorprendido darme una vuelta por la red y ver que algunos blogs de cocina hablan y recomiendan la nata en sus platos, que si fresca es mejor, que con más materia grasa es preferible porque las lights tienen productos añadidos y varios emulgentes,… enfin que no me convencen, y encima firmados por personas especializadas en nutrición.

No vamos a usar dicho producto, por eso este helado no lleva nata y es sin huevo.

Que ingredientes lleva:

  • 200 ml de leche de avena
  • 200 ml de leche semidesnatada (podéis sustituirla por otra que os parezca más adecuada)
  • 100 gr de queso fresco (hay ecológicos muy buenos)
  • 70 gr de algarroba en polvo
  • 100 gr de azúcar (si preferís que resulte más dulce, 120 gramos)
  • 70 gr. de nueces peladas

Para hacer los helados yo uso una heladera sencilla que tiene una cubitera que va en el congelador unas 48 horas antes, mejor ese tiempo porque te arriesgas a que el helado no engorde.

Mezclas la leche con el azúcar y la algarroba con la batidora, a continuación añades el queso fresco y lo bates a una velocidad muy baja o manualmente. Una vez que tienes todos los ingredientes ligados, ten preparado el recipiente de la heladera, motor y aspa y nada más echarlos, pon en marcha tu heladera. Las nueces peladas, una vez troceadas las puedes ir echando por la apertura de la heladera con el motor en funcionamiento.

Elaboración propia

Elaboración propia bpp

Una vez que tu helado ha engordado ya lo puedes meter en un recipiente para dejarlo en el congelador, para servir conviene sacarlo un tiempo antes si quieres hacer la típica bola de helado.

Galletas de almendra y coco

Cuando era pequeño desayunaba con galletas, me tomaba el cola-cao y las maría de toda la vida. A finales de los 70 no había la variedad que hay actualmente, ni mucho menos. Desayunaba y salía pitando, no comía muchas, tal vez porque  el estómago se me hacia un nudo de nervios, pero no precisamente por las galletas sino porque todos los días a las 9,00 comenzaba mi odisea con las matemáticas. Hoy las galletas si me encantan, las matemáticas se quedaron ahí…

Las matemáticas nunca despertaron mi interés, en cambio aprender a hacer galletas si,  hay que separar las cosas y hacer un guiño a esos desayunos de los 70, 80 y actuales que continúan con galletas.

Los niños y niñas de hoy seguro que no van con esos nervios de tener que salir a la pizarra a las 9,00.

Os presento unas galletas sin mantequilla y poco huevo para inaugurar esta nueva sección galletorum.  En esta receta se sustituye por el aceite de coco virgen, que es la única materia grasa que lleva, recordad que es muy beneficioso para nuestro organismo ya que es fácil de eliminar, según los expertos no es de las grasas que se te queda en plan me instalo y no me muevo. Gran parte de las recetas llevan el aceite de coco por ese motivo.

Se trata de poner un granito de arena en nuestra salud y tomar poca materia grasa, o que sea la que mejor se metaboliza, (hablo un poco más en el apartado acerca de).

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Elaboración propia bpp

Respecto a la harina (*), veréis que he puesto 130 gramos de harina normal, pero las galletas de la fotografía llevan una variación. El reparto de esos 130 gramos es: 60 de blanca ecológica + 40 de trigo sarraceno y 30 de arroz. La harina de almendras se mantiene tal cual.

  • 100 gramos de azúcar moreno molido
  • 80 gramos de harina de almendras
  • 130 gramos de harina (*)
  • 2 huevos
  • 60 gramos de aceite de coco virgen
  • 2 cucharadas de coñac, ron y otro licor
  • avellanas

Mezcla los 3 primeros ingredientes (diferentes harinas y azúcar) en un bol, con una espátula eliminando los grumos. A continuación añades un huevo revolviendo, sigues con el otro huevo, el coco y el coñac, sin batidora, manualmente; así hasta obtener una masa espesa pero muy manejable.  Para finalizar introduce la masa en una manguera o churrera para ir colocando las galletas en la bandeja del horno. Previamente en la bandeja pon un papel de aluminio o papel de hornear. Unas galletas van con una avellana en medio y otras no, para satisfacer todos los gustos. Las almendras puede ser buena opción, no tenía en casa y por no bajar a comprar.

Hornea unos 15 minutos a 180 grados. Obtendrás entre 30-35 galletas aproximadamente.

Tarta de arándanos sin lactosa

¿Quieres hacer una tarta sin mantequilla? ¿Tienes intolerancia a la lactosa? Pues has dado con la receta adecuada. Esta tarta con arándanos puede llevar otro tipo de frutas, por ejemplo unas fresas. No os asustéis por las 3 masas que no es muy complicada y aunque te lleva tiempo merece la pena el resultado.

Masa 1. Es la masa quebrada típica sin mantequilla, va al horno y lleva lo siguiente:
– 150 gr. de harina
– 75 gr. de harina de almendras
– 75 gr. de azúcar moreno molido (con un molinillo de los de café queda perfecto, muele de más para los otros usos)
– 50 gr. de coco virgen (en tarros de cristal, es blando de color blanco)
– 50 ml de aceite de girasol (unas 6 cucharadas soperas)

Molde

Molde

Coloca los 3 ingredientes secos de la masa 1 en un bol, añades los otros dos (coco y aceite) hasta conseguir una masa homogénea. La envuelves en un film de plástico y la dejas en la nevera una hora y media aproximadamente. En el molde te aconsejo poner un papel de cocina previamente untado en aceite que cubra la base del molde. La masa al estirarla se extiende con facilidad pero no es una masa elástica por lo que tendrás que ir poniéndola con cuidado hasta conseguir extenderla homogéneamente en el molde. Este paso es lo que lleva más tiempo. A continuación una vez finalizado te aconsejo poner otro molde vacio encima para evitar que suba, ponle un papel de aluminio engrasado entre la masa y el molde vacio. La horneas a unos 180 grados unos 25-30 minutos o hasta que veas que está dorada. Cuando la saques del horno ten cuidado porque un golpe la desmorona con facilidad.
 

Masa 2. Crema pastelera sin leche, se utiliza la vitro y lleva lo siguiente:
400 ml de bebida de avena
100 gr de azúcar moreno
1 corteza de limón (sin la parte blanca)
1 rama de canela
35 gr de harina de arroz
2 yemas

Con crema pastelera

con crema pastelera

Las 3/4 partes tanto de la bebida de avena como del azúcar moreno molido junto con la corteza del limón y la canela se ponen a calentar en un fuego medio. En un bol, en frio, habrás batido las 2 yemas con el resto del azúcar y la harina de arroz, aquí vas incorporando la leche que has dejado pendiente hasta conseguir una mezcla bastante líquida. Cuando la bebida de avena ha cogido calor suficiente y el sabor del resto de ingredientes le iremos echando la mezcla líquida del bol que lleva las yemas, poco a poco y sin dejar de revolver. Así hasta que espese la crema. Recuerda hacerlo en un fuego medio.
La base una vez hecha y fuera del horno se cubrirá con esta crema pastelera.

Masa 3 Crema de arándanos, sin horno ni vitro, en frio:
150 gr. de queso fresco (yo uso uno de herbolario de la marca OMA que se llama California)
100 gr. de arándanos
75 gr de azúcar moreno molido

Tritura con la batidora un tercio del queso con la mitad del azúcar y la mayor parte de los arándanos (reserva un tercio para decorar). Cuando la mezcla esté lista incorpora el resto del queso y azúcar hasta conseguir una masa homogenea, esto hazlo manualmente. Esta crema irá por encima de la crema pastelera que ya habrá cogido forma.

Decora con unos arándanos, con un almíbar o con aquello que le pueda ir bien, es cuestión de gustos, en la foto verás arándanos con claras a punto de nieve con unos minutos de horno fuerte. No la quites del molde y al servirla es mejor que esté fria

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